Bella, la perra que ganó notoriedad por haber mordido a Diego Armando Maradona en marzo de este año (y la impulsora, en definitiva, de la barba que lució el entrenador en Sudáfrica con el objetivo de tapar la cicatriz), murió ayer como consecuencia de un cuadro de insuficiencia renal.
"Estamos muy tristes porque veíamos a Bella sufrir y nos desesperábamos para que estuviera bien. Pero esta enfermedad es terrible. Nosotros le dimos todo el amor que pudimos" , comentó Verónica Ojeda, la novia de Diego, a La Posta TV.
"Cuando la compramos nunca nos dijieron que la perrita había nacido con esta enfermedad. El criador de Bella es un sinvergüenza", se quejó.
La shar pei había atacado imprevistamente a Maradona en la madrugada del 29 de marzo pasado, produciéndole una profunda herida por la cual el entonces técnico de la selección argentina recibió diez puntos de sutura.
El médico personal de Diego, Alfredo Cahe, relató por aquellos días que Verónica lo había llamado desesperada, dado que la herida sangraba mucho: "Lo había mordido en el labio superior, lo hice venir para la clínica (el Sanatario de los Arcos) a las tres y media, la herida era profunda y curva, o sea que no era una herida lineal".
"Fue un arranque de la perra, eso me dice Diego, porque nunca tuvo una actitud así en más de tres años que la tiene", completó el doctor. Pese a eso, en los días posteriores se instaló el rumor de que la pareja había decidido desprenderse de la perra entregándola en una veterinaria.
"Estamos muy tristes porque veíamos a Bella sufrir y nos desesperábamos para que estuviera bien. Pero esta enfermedad es terrible. Nosotros le dimos todo el amor que pudimos" , comentó Verónica Ojeda, la novia de Diego, a La Posta TV.
"Cuando la compramos nunca nos dijieron que la perrita había nacido con esta enfermedad. El criador de Bella es un sinvergüenza", se quejó.
La shar pei había atacado imprevistamente a Maradona en la madrugada del 29 de marzo pasado, produciéndole una profunda herida por la cual el entonces técnico de la selección argentina recibió diez puntos de sutura.
El médico personal de Diego, Alfredo Cahe, relató por aquellos días que Verónica lo había llamado desesperada, dado que la herida sangraba mucho: "Lo había mordido en el labio superior, lo hice venir para la clínica (el Sanatario de los Arcos) a las tres y media, la herida era profunda y curva, o sea que no era una herida lineal".
"Fue un arranque de la perra, eso me dice Diego, porque nunca tuvo una actitud así en más de tres años que la tiene", completó el doctor. Pese a eso, en los días posteriores se instaló el rumor de que la pareja había decidido desprenderse de la perra entregándola en una veterinaria.
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