La ONG "Pro Animal" anunció este jueves que interpondrá una querella criminal contra "quienes resulten responsables" por el envenenamiento de 19 perros que pertenecían a Aída Silva, quien los mantenía en un refugio canino situado en las Rocas de Santo Domingo, V Región.
Patricia Cocas, presidenta de la ONG, sostuvo que el acto es de una "maldad y crueldad extrema". Las mascotas fueron envenenadas por "un cretino sin alma. No se encuentra explicación de cómo puede haber personas capaces de hacer semejantes atrocidades", argumenta la vocera.
Todo quedó a la luz cuando Aída Silva se llevó la desagradable sorpresa tras concurrir el 25 de diciembre al refugio, donde se dio cuenta que 19 de los 64 animales estaban envenenados.
"Entró mi hijo a avisarme que el Cholito, uno de los perros más significativos porque tenía 19 años, estaba muerto", cuenta la dueña de los animales. "Ahí empecé a ver que los demás perros estaban agonizando, convulsionando... Se notaba que habían ingerido un tóxico muy fuerte", agrega.
Aún no se sabe quién ni cuál fue el veneno administrado. Las pericias que la Policía de Investigaciones (PDI) realizó aquella mañana, aún no dan resultados. Sin embargo, Aída tiene algunas sospechas sobre quién pudo haber sido, las que hoy están siendo investigadas por el Fiscal de San Antonio, Ramón Espinoza.
"Dos semanas antes, un vecino me amenazó y me dijo que iba a terminar con los perros porque, simplemente, a él no le gustaban", contó.
Por su parte, Cocas invitó al culpable a confesar el crimen. "Insto al cobarde que hizo esto a que dé la cara. Si es tan valiente para atreverse a tirar cebos (...), que ahora dé la cara", lanzó.
Patricia Cocas, presidenta de la ONG, sostuvo que el acto es de una "maldad y crueldad extrema". Las mascotas fueron envenenadas por "un cretino sin alma. No se encuentra explicación de cómo puede haber personas capaces de hacer semejantes atrocidades", argumenta la vocera.
Todo quedó a la luz cuando Aída Silva se llevó la desagradable sorpresa tras concurrir el 25 de diciembre al refugio, donde se dio cuenta que 19 de los 64 animales estaban envenenados.
"Entró mi hijo a avisarme que el Cholito, uno de los perros más significativos porque tenía 19 años, estaba muerto", cuenta la dueña de los animales. "Ahí empecé a ver que los demás perros estaban agonizando, convulsionando... Se notaba que habían ingerido un tóxico muy fuerte", agrega.
Aún no se sabe quién ni cuál fue el veneno administrado. Las pericias que la Policía de Investigaciones (PDI) realizó aquella mañana, aún no dan resultados. Sin embargo, Aída tiene algunas sospechas sobre quién pudo haber sido, las que hoy están siendo investigadas por el Fiscal de San Antonio, Ramón Espinoza.
"Dos semanas antes, un vecino me amenazó y me dijo que iba a terminar con los perros porque, simplemente, a él no le gustaban", contó.
Por su parte, Cocas invitó al culpable a confesar el crimen. "Insto al cobarde que hizo esto a que dé la cara. Si es tan valiente para atreverse a tirar cebos (...), que ahora dé la cara", lanzó.
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