A sus cortos tres meses, aproximadamente, "Fanta" debió experimentar una de sus experiencias más terroríficas: sobrevivir al incendio de la Vega Monumental. Como pudo, este insigne gato debió luchar contra el miedo y las llamas para salvar su vida. No se sabe si era parte de una familia de felinos que pereció en el siniestro o si habría sido abandonado en el centro comercial por algún desalmado.
De lo único que hay conocimiento es de que su valentía y ganas de vivir le permitieron encontrar un lugar seguro donde guarecerse hasta ser rescatado. "Mientras realizábamos las labores de investigación, escuchamos unos maullidos y vimos que se trataba del gatito. Estaba atrapado tras una rejilla, por lo que debimos trabajar para sacarlo", señaló Cristian Huerta, voluntario de la Primera Compañía de Bomberos de Concepción.
El pobre minino presentaba diversas quemaduras, ya no tenía sus bigotes y el pelaje había sido consumido por la acción del fuego. No obstante, "lo más grave son las heridas que tiene en los cojinetes plantales. Además quedó sin pelos olfativos ni pestañas", indicó el médico veterinario de la Universidad San Sebastián, Miguel Mancilla.Puro cariño y amorLuego de causar un gran enternecimiento entre los bomberos, "Fanta" fue trasladado hasta el centro asistencial universitario para ser atendido por los especialistas.
Como era de esperarse, el misifús se ganó los corazones de los doctores, quienes le pusieron el nombre en honor a la bebida. "Es de color naranjo y como la Fanta es naranja, le puse así", explicó Paulo Montiel, médico veterinario de la USS.Ahora sólo queda esperar a que "Fanta" encuentre un nuevo amo a quien deleitar con su jugueteo y su mirada tierna. Aunque según Montiel "si no aparece alguna persona que quiera llevárselo para su casa, creo que yo me lo tendré que llevar para que le haga compañía a otro gatito que tengo.Por ahora, el minino está siendo atendido y bien alimentado por los profesionales de la universidad.
Fuente: crónica.cl
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