Un informe toxicológico encontró en su orina residuos de un sustituto de la heroína. El zoológico que los alojaba había alquilado sus instalaciones el fin de semana anterior para una fiesta rave
Un área del zoológico de Connyland en Lipperswil fue rentada para que se organizara una fiesta de música electrónica, después de la cual murieron los delfines Shadow y Chelmers.
Inicialmente se creía que de alguna manera los decibeles del techno habían afectado a los delfines (animales sumamente sensibles al sonido); luego se manejó la posibilidad de que los mismos veterinarios del zoológico los habían intoxicado. Pero un examen forense realizado por el Instituto de St. Gallen encontró rastros de Buprenorfina (un popular substituto de la heroína) en la orina de los cetáceosShadow murió lentamente, tras una agonía de varias horas en el acuario de Connyland, ubicado en Lauperswil, localidad perteneciente al cantón suizo de Berna. Cinco días después, lo mismo le pasó a Chelmers, el segundo delfín muerto.
"Fue horrendo. No pude dormir desde entonces", confesó a medios locales Nadja Gasser, una de las cuidadoras de los animales. "Cuando quisimos empezar el entrenamiento, notamos que Chelmers se movía sin sentido debajo del agua y que claramente estaba en problemas, así que nos sumergimos -contó-. Se sacudía de un lado a otro y echaba espuma por la boca. Después lo sacamos del agua. Tenía la lengua colgando y apenas podía respirar. Le dimos adrenalina, pero no ayudó. Hasta que después de una hora, murió". En un principio, los investigadores del caso culparon a los veterinarios de haberles suministrado antibióticos perjudiciales para su salud. Pero el informe posterior halló en la orina de los delfines buprenorfina, que es un sustituto de la heroína. Lo que no se confirmó es si esa sustancia fue ingerida causalmente o se la dieron los asistentes a la fiesta.
Drogas de ese tipo hacen que los delfines pierdan la conciencia, impidiéndoles subir a la superficie para tomar aire.
No hay comentarios:
Publicar un comentario