Mei estaba empapada y asustada en una jaula de un comercio de Nanhai (China). Permanecía encerrada con otros catorce gatos que, como ella, habían sido capturados de la calle por traficantes de animales. Todos fueron vendidos a los restaurantes de la zona donde los golpearon en la cabeza y metieron en agua hirviendo para preparar el famoso plato "Dragón, Tigre y Fénix".
Esta nota y una amplia investigación, desnuda la crueldad de los mercaderes y las mafias chinas que trafican con animales a vista y paciencia de las autoridades.
(vea reportaje investigativo de Igualdad Animal)
Igualdad Animal.
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